Estimados músicos, cantantes, bailarines, técnicos, administrativos, trabajadores del Municipal:
Hace seis semanas y algunos días que llegó esta cuarentena a instalarse en nuestras vidas. Nos arrancó de la cotidianidad, cuya principal certeza estaba reflejada en el Teatro Municipal. Edificio e institución histórica y republicana, incomprendida para unos, un templo para nosotros. Espacio de trabajo, amistad, colaboración, desafíos, alegrías y penas. Un lugar donde simplemente transcurría la vida misma –nuestra vida- entre función y función.
La cultura está hoy suspendida en el tiempo, y con ella, nosotros suspendidos en el aire. Una sensación de angustia, de incertidumbre, de extrañeza, sensaciones que buscan dar sentido a múltiples explicaciones –murciélagos, guerras bacteriológicas, descuido- que se vuelven inverosímiles o sacadas de un libro de ficción. Quién podría decir hoy cuál es la verdad.
La realidad es que estamos navegando en aguas tan movedizas como las arenas, tomando decisiones día a día, solucionando los desafíos que surgen.
Sé que todos ustedes tienen preguntas, decenas por días. En realidad todos las tenemos, en Chile y en el mundo entero. Porque estamos sometidos a una pausa de desconcierto. Quisiera tener múltiples frases ciertas para regalarles. Sólo tengo un puñado.
– Manténganse activos: no pongan por delante el objetivo, sencillamente recorran un camino cada día. Ensayen lo que quieran/puedan, lo que les haga sentir mejor. En grupo o juntos usando alguna plataforma tecnológica. Tengan la certeza, además, que las redes del Teatro están abiertas para recibir sus creaciones. Inspírense si les hace sentido, en la Temporada que anunciamos para este 2020 o en los sueños para el futuro de los que hablamos alguna vez. Es momento de detenerse sin culpa en esos “amores” secretos. No son tiempos para perfecciones. Son tiempos para alimentar el alma.
– Traten de mantener alguna actividad física: Eso les permitirá botar el estrés que acumula el encierro. Hay clases de todo lo imaginable y gratis en redes sociales y plataformas digitales.
– Prepárense para regresar al trabajo este 2020: Cuando las condiciones sanitarias estén dadas y tengamos definidos los protocolos internos, volveremos a nuestro quehacer con nueva energía. Las direcciones de cada cuerpo estable ya trabajan en ese plan de regreso para tenerlo listo cuando sea el momento de retomar las actividades.
– Mayo: Mantenemos la decisión de tener el Teatro cerrado y las actividades suspendidas hasta fines de mayo. A comienzos de ese mes, evaluaremos si es necesario definir una nueva fecha, acorde a la situación general de contagios en el país. El factor invierno jugará en contra del proceso sanitario por las razones que todos conocemos. Y eso puede alterar las curvas que conocemos hoy.
– Reapertura de la sala principal: Estamos analizando diferentes escenarios considerando todos los factores -que controlamos y que no controlamos-, con información internacional de países que van adelantados en este proceso (Europa) y pensando en ustedes, el público y el país, para tomar la mejor decisión posible en este contexto. Será un proceso a preparar minuciosamente, porque son cientos los detalles que hay que conjugar para tomar la mejor decisión posible.
– Finanzas: se acerca mayo, que es un mes complicado desde el punto de vista caja. Leonardo y yo estamos haciendo gestiones en el mundo público y privado para tener los fondos suficientes para cubrir nuestras obligaciones. Lamentablemente, uno de nuestros auspiciadores, decidió aportar sólo un tercio de lo comprometido y estamos viendo de qué manera obtener nuevos fondos a través de la plataforma digital para paliar esa diferencia. Del mismo modo, en junio debiera llegar la segunda remesa del Ministerio de las Culturas, Las Artes y el Patrimonio, y los aportes de las Municipalidades, debieran confirmarse en las próximas semanas.
Algunas instituciones culturales desaparecerán en esta crisis. Es una realidad. Pero el Teatro Municipal no será una de ellas. Con esa convicción y junto al Directorio, seguimos gestionando todos los frentes para garantizar que la cultura sigue más viva que nunca, aunque sea en un escenario más que adverso. Hay un equipo profesional comprometido que, al igual que todos nosotros, con nuestro esfuerzo le damos vida y sentido a la institución. Tenemos creatividad, inteligencia, motivación y voluntad. Estamos en el mismo barco.
En este Día del Trabajador, es bueno mantener firme el timón. Mirada en alto. Cabeza fría. Los ojos bien abiertos. El corazón cálido. Las ideas atrevidas. El pensamiento en grande. Dejar de lado las frustraciones. Conocer la realidad, pero sin dejar de soñar. Dejar brotar las sonrisas. Y mirar el horizonte y siempre un poco más allá.
Con ustedes y esta institución siempre en el corazón y el pensamiento, les mando un abrazo virtual.
Carmen Gloria Larenas
Directora General